Estos días en las redes estoy leyendo de todo respecto a este tema: parejas con niños pequeños que no ven el momento para tener relaciones sexuales, otras que no paran de tenerlas, chicas que no dan descanso al Satisfyer, otras arrepintiéndose de no haberlo comprado todavía, gente que se inventa todo lo anterior… Lo que sí está claro es que el sexting (envío de mensajes con contenido sexual) y el cibersexo en general, están siendo dos de la opciones más socorridas llevadas a la práctica durante este confinamiento, sobre todo por parejas que están viviéndolo por separado. Las sex webcams están siendo un recurso entre los menos tímidos y tímidas; el principal aliciente en su uso en estos días parece ser que es el hecho de que tras la cámara haya una persona con la que previamente ya había un vínculo, que no significa que se hubiese hecho uso anteriormente de ella con este fin, lo cual puede añadir aún más morbo al juego. Hay personas, por el contrario, que prefieren que tras la cámara haya alguien desconocido.  

Otro de los recursos más utilizados está siendo el porno. Han aumentado un 200 % las búsquedas en la red de vídeos con contenido adulto. La web Pornhub ya comunicaba que mientras durase la cuarentena ofrecería su servicio premium gratis. Y es que veinticuatro horas son muchas horas que ocupar, y el sexo tiene, en muchos casos, unos ingredientes bastante apetecibles que pueden convertirlo en una buena opción para invertir parte de este tiempo. 

Personalmente, hay tres cosas básicas que me encantaría hacer patente en este confinamiento: 

  1. Que no es obligatorio ni eres atípico o atípica porque tu vida sexual no haya cambiado en nada durante la cuarentena.
  1. Que el sexo no se reduce a practicar el coito y hay tantas eróticas como mentes. ¿Que quieres aprovechar el confinamiento para salir de tu rutina sexual? Genial…
  1. Si estás confinado o confinada con tu pareja y te apetece tener sexo contigo mismo y no siempre con la otra persona, que sepas que es muy sano disfrutar en solitario y no depender de alguien para tener placer. Esto que parece tan evidente, crea mucho conflicto entre parejas que no entienden que uno de los dos se masturbe teniendo una relación con otra persona. 

En un sistema en el que somos esclavos, en el que vamos corriendo de un lado a otro, donde nos pasamos casi la mitad del día trabajando, que cuando llegamos a casa estamos agotados o agotadas, ahora que tenemos mucho más tiempo, qué tal un poco de slow sex –los mejores platos se cocinan a fuego lento-. Ahí lo dejo…

Termino sin olvidarme de aquellas personas a las que no les está apeteciendo tener sexo durante el confinamiento. Vamos al lado opuesto de lo visto anteriormente: personas que en estos días tienen un deseo sexual hipoactivo. Quizá en casa no se está tan mal, pero la realidad fuera está siendo muy difícil, y a nivel emocional no todo el mundo es capaz de gestionar esas preocupaciones, miedo, rabia, tristeza… Es muy respetable y a la vez muy importante que escuchemos cuáles son nuestras necesidades y no forzar nada. Para algunos y algunas no es momento de pensar en sexo, y es tan respetable como estar pasando una cuarentena hipersexualizada. 

Y algo fundamental: Huyamos de la típica lista de “tips para tener buen sexo durante la cuarentena”. Que cada uno tenga el sexo que le apetezca, cuándo y cómo le venga en gana -siempre respetando las limitaciones impuestas por el estado de alarma, que os conozco-, porque nos venden un sexo ideal generalizado que NO existe. Cada persona somos un mundo, cada pareja es un mundo, y tan frustrante era la represión, el tabú, la falta de libertades, sobre todo para la mujer, como los listados de  todas las cosas que supuestamente tenemos que hacer ahora para poder disfrutar, y con las que estás tan pendiente de hacer lo que te dicen, que no te dejas llevar. Este es el único consejo que voy a daros. 

Ana Casado. PSICÓLOGA
https://twitter.com/home?lang=es